viernes, 10 de octubre de 2008

TABACARIA (FRAGMENTO), DE FERNANDO PESSOA

Pero el dueño del estanco llegó a la puerta y se quedó a la puerta.
Ojo con el desaliento de la cabeza mal vuelta
y con el desconsuelo del alma mal-entendiendo.
Él morirá y yo moriré.
Él dejará el letrero, y yo dejaré versos.
En determinado momento morirá el letrero también, y los versos también.
Después de cierto tiempo morirá la calle donde estuvo el letrero.
Y la lengua en que fueron escritos estos versos.
Morirá después el planeta que gira en que todo esto sucedió.
En otros satélites, de otros sistemas, cualquier cosa como gente
continuará haciendo cosas como versos,
viviendo por debajo de cosas como letreros,
siempre una cosa enfrente de otra,
siempre una cosa tan inútil como la otra,
siempre lo imposible tan estúpido como lo real,
siempre el misterio del fondo tan cierto como el sueño de misterio de la superficie,
siempre esto o siempre otra cosa o ni una cosa ni otra.

Pero un hombre entró en el estanco (¿a comprar tabaco?)
,y la realidad plausible cae de repente encima de mí.
Me incorporo casi enérgico, convencido, humano,
y voy a intentar escribir estos versos en que digo lo contrario.
Enciendo un cigarro al pensar en escribirlos
y saboreo en el cigarro la liberación de todos los pensamientos.
Sigo el humo como una ruta propia,
y gozo, en un momento sensitivo y competente,
la liberación de todas las especulaciones
y la conciencia de que la metafísica es una consecuencia de estar malhumorado.
Después me echo para atrás en la silla
y continúo fumando.
Mientras el Destino me lo conceda, continuaré fumando.

(Trad. Alfonso Salazar)

2 comentarios:

  1. excelente, fabulodo, pessoa es uno de los grandes,
    y la traducción muy buena, creo, siento...gracias
    desde lima, perú, rosina

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